Movilidad sostenibile, metro gratuito y sistemas verticales prorrogados hasta el 31 de Julio.

 
La decisión, tomada por el Municipio de Génova junto con AMT, se hizo oficial durante una conferencia de prensa que tuvo lugar esta tarde en el Palacio Tursi con la participación del concejal de movilidad y transporte integrado Matteo Campora y el presidente de AMT Marco Beltrami. 

Dado el éxito y la satisfacción de los primeros 4 meses de experimentación, que comenzaron el 1 de diciembre de 2021 y finalizan el jueves 31 de marzo, la Municipalidad de Génova y AMT han establecido la continuación de la entrada gratuita de la misma manera.

Los ascensores verticales (ascensores, funiculares y piñón y cremallera) seguirán siendo gratuitos todos los días de la semana sin límite de horario, mientras que para el metro el billete gratuito cubrirá las dos franjas horarias blandas: todos los días de 10 a 16 y de 20 a 20. a 22 .
 
El metro libre y los sistemas verticales tienen como objetivo extender al máximo el uso del transporte público en la ciudad, con el fin de promover una movilidad más sostenible. De hecho, al aumentar el número de usuarios de LPT (Transporte Público Local), se reduce la circulación de vehículos privados y las emisiones de CO₂.

Además, la experimentación representó el primer paso en la revisión de los horarios de la ciudad que pudo tener lugar gracias a la implementación de los Planes de Viaje Casa-Trabajo del Municipio de Génova y de las principales empresas con sede en la ciudad.


Números y balance de la experimentación

Se verificaron los efectos del uso de la palanca tarifaria del transporte público en diferentes niveles: la captación de nuevos usuarios, el reequilibrio de cargas con el movimiento de usuarios de la hora punta a la blanda, las condiciones del aire y las condiciones de tráfico de impacto, con una disminución en el número de vehículos privados en la vía que evitó la congestión del tráfico de la ciudad.


Los sistemas de conteo de pasajeros desarrollados en 2021 permitieron evaluar con precisión las tendencias. Los primeros 4 meses proporcionaron datos muy interesantes, con una creciente apreciación y uso por parte de los ciudadanos genoveses: de ahí la necesidad de continuar la experimentación para evaluar completamente el potencial del acceso gratuito.

Para una mejor lectura de los resultados, también se realizaron encuestas a los clientes, con el objetivo de comprender los motivos de sus movimientos en el campo libre.

El crecimiento en el uso del sistema hierro/cable generó datos significativos en marzo, entre ellos:

• 33,4% de aumento en el uso de sistemas verticales;

• un aumento del 18% en el uso del segmento libre del metro en marzo, equivalente a 36.000 pasajeros más;

• 25% de estos han cambiado sus hábitos de viaje para aprovechar el billete gratis;

• El 26% de los que cambiaron de hábitos antes viajaba con vehículo privado. Esto significa que cada semana de marzo se han eliminado más de 3.000 viajes realizados con vehículos térmicos, con un importante beneficio ambiental.

 

Los datos obtenidos van más allá de los resultados encontrados en la literatura, indicando así un camino de desarrollo de gran interés.


Génova fue la primera gran ciudad italiana en experimentar con el transporte público gratuito para vehículos y franjas horarias específicas, mientras que otros centros urbanos del país han optado por la exención del pago de los billetes de viaje solo para determinadas categorías de personas.

"Génova tiene la ambición de convertirse en la primera ciudad de Italia con transporte público de acceso gratuito - declara el alcalde de Génova Marco Bucci -. Esta experimentación es uno de los primeros pasos de un proyecto que pretende revolucionar el sistema y fomentar el uso del transporte público local en la ciudad con un sistema integrado y eficiente. Las actuaciones de mejora del sistema de infraestructuras, desde la ampliación de la actual línea de metro hasta el Valbisagno Skymetro hasta el sistema de 5 ejes, vendrán acompañadas de la sustitución de toda la flota de vehículos de AMT que en 2025 serán todos eléctricos. Estamos viviendo un momento de revolución de época en la forma de concebir el transporte público en Génova. El hecho de que los datos sobre esta experimentación superen incluso nuestras expectativas y que los genoveses hayan recibido nuestro mensaje me reconforta por la elección realizada
"Estamos muy satisfechos con la excelente respuesta recibida de la experimentación de sistemas de metro y verticales libres - comenta el concejal de movilidad y transporte integrados Matteo Campora -. El objetivo era hacer que el Transporte Público Local fuera más atractivo para los genoveses y los turistas, y los números dicen que lo logramos. Renunciar al vehículo privado en favor del público es una forma concreta de descongestionar el tráfico de la ciudad, adoptando hábitos de movilidad más activos y respetuosos con el medio ambiente. Con esta experimentación queríamos mostrar a los ciudadanos y visitantes lo cómodo y rápido que es utilizar el metro, los ascensores, los funiculares y el tren cremallera para moverse por la ciudad. Una demostración práctica de Génova que tomará forma en los próximos años con el plan de los 5 ejes de fuerza del TPL genovés, que se volverá aún más cómodo, eficiente, rápido y sostenible».

 

«Los resultados obtenidos hasta ahora de la prueba gratuita son extremadamente interesantes, diría sorprendentes y en constante mejora - subraya el presidente de AMT Marco Beltrami -. Es por eso que me parece apropiado continuar durante unos meses para comprender cuál es el potencial real de cambios en el comportamiento debido a la gratuidad. Agradezco al Municipio ya la Región por haber encontrado las fuentes de financiación que nos permitirán llevar a cabo esta experimentación sin penalizar la llevanza de la contabilidad económica de AMT».

 

«Si los mismos recursos se hubieran utilizado para reducir tarifas y abonos de forma generalizada -añade el coordinador de movilidad urbana sostenible Enrico Musso- habríamos hecho más felices a los usuarios del transporte público pero no habríamos “convertido” a casi ningún automovilista. En cambio, atrajeron a nuevos usuarios, quienes de esta manera experimentaron el transporte público y sus ventajas, a menudo subestimadas. Está claro que "ninguna comida es gratis", y tampoco lo es el transporte. En teoría, la solución liberal sería hacer que los coches paguen por la contaminación y la congestión que provocan, mientras que de esta forma todos los contribuyentes, motoristas y no motoristas, paguen el incentivo del transporte público. Pero es un buen comienzo para impulsar una movilidad más sostenible “con mucha suerte”.