Murió José Pepe Mujica, expresidente de Uruguay: tenía 89 años y llevaba tiempo enfermo


Falleció José ‘Pepe’ Mujica, presidente de Uruguay de 2010 a 2015. Tenía 89 años y el 20 de mayo habría cumplido 90. Llevaba tiempo sufriendo un cáncer de esófago y recibía cuidados paliativos. En 2021, le dijo a Fanpage: “La tarea de un líder político es dejar corazones y brazos que lo reemplacen cuando se vaya”.

Hace unos meses, el 9 de enero, Mujica anunció que el tumor se había extendido del esófago al hígado y que suspendería el tratamiento: “Mi cuerpo no aguanta más. Mi ciclo terminó y un guerrillero tiene derecho a descansar”, dijo. Ayer, su esposa Lucía Topolansky (ex senadora y vicepresidenta del país entre 2017 y 2020) había hecho saber que el expresidente estaba “al final”. Y añadió: «Llevo más de 40 años con él y estaré con él hasta el final. Esa fue mi promesa». Su muerte fue anunciada por el actual presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, quien lo calificó de “presidente, activista, guía y líder”.


La vida de Pepe Mujica, de campesino y guerrillero a presidente
Mujica había sido guerrillero de los Tupamaros (o MLN-T), un movimiento guerrillero urbano de izquierda inspirado en la revolución cubana y activo en Uruguay entre los años 1960 y 1970 y durante la dictadura, cuando ‘Pepe’ pasó doce años en prisión, en total aislamiento, sufriendo torturas extremadamente duras. Fue liberado recién en 1985, con el regreso de la democracia, cuando los presos políticos recibieron amnistía.


Fue uno de los fundadores del Movimiento de Participación Popular, o MPP, principal formación política del Frente Amplio. Elegido por primera vez al Parlamento en 1994, fue nombrado Ministro de Ganadería en 2005. En 2009, ganó las elecciones presidenciales con el 48% de los votos.

Un Presidente que Vivió como Pensaba

José “Pepe” Mujica, expresidente de Uruguay, falleció a los 89 años tras una lucha contra el cáncer de esófago. Conocido por su estilo de vida austero y su compromiso con la justicia social, Mujica dejó una huella imborrable en la política uruguaya y latinoamericana. Durante su mandato (2010-2015), implementó reformas progresistas como la legalización del matrimonio igualitario, la regulación del mercado de cannabis y la despenalización del aborto en el primer trimestre .

Su filosofía de vida se reflejaba en frases como:

  • “No soy pobre, soy sobrio, liviano de equipaje. Vivo con lo justo para que las cosas no me roben la libertad.”
  • “La política es la lucha por la felicidad de todos.”
  • “El poder no cambia a las personas, solo revela quiénes verdaderamente son.”

Estas palabras encapsulan su visión de una política al servicio de la mayoría y de una vida centrada en valores más que en bienes materiales.

Reacciones y Homenajes
La noticia de su fallecimiento generó una ola de reacciones en toda América Latina. El presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, expresó su pesar, mientras que líderes como Gustavo Petro, Claudia Sheinbaum y Pedro Sánchez destacaron su humildad y compromiso con la integración regional

El senador Charles Carrera Leal escribió:

“Hoy Pepe nos dejó un nudo en la garganta pero, también, un mensaje de esperanza para los jóvenes. Que la vida es preciosa y no se termina si hay quien tome la posta y levante tus banderas.”

Estas muestras de afecto reflejan el profundo impacto que Mujica tuvo en la política y en la vida de muchas personas.

Un Legado que Trasciende Fronteras

Mujica no solo transformó Uruguay, sino que también se convirtió en un símbolo de liderazgo ético y coherente en todo el mundo. Su vida y obra continúan inspirando a quienes buscan una política más humana y comprometida con el bienestar colectivo.

Como él mismo dijo:

“La política no es una profesión, es el sentido que he encontrado a la vida.”

Su legado perdurará como un faro de esperanza y un llamado a vivir con autenticidad y compromiso social.

@ivonnetorrestacle1 – Il Quotidiano Latinoamericano